La ministra de Salud manifestó varias veces durante la semana su preocupación por la relajación de las medidas preventivas y el aumento de contagios que se está dando, incluso expresando que "este es el momento más crítico".
El Director de CoPreCOVID dijo en una conferencia de prensa, la misma que anunció su renuncia, que las salas de intensivo de los hospitales públicos están saturadas, y que nos dirigíamos hacia una segunda ola, que podría ser más intensa que la primera.
Estas declaraciones tienen a muchos preocupados por la situación, así que es un buen momento para hacer una revisión de lo que está sucediendo. Vamos por partes:
1). Si, las salas de intensivo están llenas, según la gráfica que nos mostraron (la información no es pública), pero la ocupación hospitalaria en general está baja aun. La explicación que dan es que los casos son en su mayoría en gente joven y estos no necesitan hospitalización, pero al mismo tiempo hay una creciente cantidad de enfermos severos que necesitan de intensivo. El punto débil del país para enfrentar la pandemia siempre ha sido el sistema hospitalario, y en especial las camas de cuidados intensivos. Lamentablemente tenemos muy pocas y se llenan muy rápido.
2). Los casos a nivel nacional no han aumentado, como puedes ver en la gráfica que publiqué. Desde la primera semana de julio, cuando fue el pico, hemos experimentado un descenso en el que ya llevamos 23 semanas. Estamos en una "meseta" continua, de tal manera que la semana anterior tuvimos la misma cantidad de casos que hace cinco semanas.
3). Si ves más a detalle, podrás notar un leve aumento de casos en las últimas dos semanas, algo que se evidencia aún más en la región metropolitana por las últimas seis semanas. Municipios como Santa Catarina Pinula o la capital son los que han visto mayor alza. El crecimiento ha sido leve y gradual, por lo que no se espera que explote antes de Navidad al punto que afecte el comercio o las fiestas de fin de año.
4) Habiendo dicho lo anterior, debo añadir también que este período es el de mayor riesgo de contagios, por la actividad comercial y social que se dará, y por lo tanto hay una amenaza grande de que los casos si crezcan considerablemente como consecuencia, evidenciándose a finales de diciembre o inicios de enero. Por eso cero que las autoridades de salud han salido varias veces a advertirnos que seamos prudentes, y evitar así que colapse el sistema de salud y se recargue al personal médico.
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