En la maratón del COVID se hacen ajustes en la marcha. A las tres semanas de haber anunciado el sistema de semáforo, las autoridades mexicanas procedieron a hacer ajustes a los indicadores.
Los hondureños, salvadoreños, ticos y panameños también lo han hecho, al igual que los chilenos y peruanos. Estados Unidos ha cambiado sus procedimientos y Europa también. Nadie es experto en el manejo del COVID, aprendemos en la marcha, y por eso la flexibilidad y capacidad de adaptación es indispensable en las medidas gubernamentales.
Guatemala no será la excepción. Ya hemos visto cambios a las medidas anunciadas y veremos más. Para ahora las autoridades deben haberse dado cuenta que los indicadores del semáforo están muy apretados y no son realistas, pues es muy fácil subir de color, pero muy difícil bajar. Por eso, espera cambios en la Cadena Nacional de mañana, y no te extrañe que a mediados de agosto veamos más.
El principal cambio que yo haría al proceso de apertura sería integrar el semáforo a los indicadores anunciados el 3 de junio en el Acuerdo Ministerial 146-2020 del Ministerio de Salud, que fue el primer sistema que CoPreCOVID nos dio. En resumen, se pasaba de una fase a otra al cumplir una tendencia a la baja. Estos indicadores decían que se podía proceder a fase 0 si se mostraban 14 días a la baja, y a fase 1 si se mostraban otros 14 días más de descenso, y así progresivamente
Mi plan sería así:
1) Se clasificarían los municipio o departamentos de acuerdo a los indicadores del semáforo (a los nuevos que anuncien mañana), de tal manera que la Ciudad de Guatemala, Mixco y Villa Nueva estarían en color rojo.
2) Para prepararse a salir del color rojo se deben mostrar 14 días con tendencia a la baja, lo que éstos 3 municipios ya mostraron, y para llegar a color anaranjado deben mostrar un segundo período de 14 días a la baja. Con un tercer plazo de 14 días se trasladarían a amarillo y unos 14 más a verde.
Esa sería una forma responsable de proceder a la apertura, después de superar el pico de contagios, siguiendo lo establecido por los técnicos de CoPreCOVID originalmente, y en línea con lo que otros países hicieron. De ésta forma la ciudad estaría a unos 10 días de llegar a naranja, resultado del descenso de la curva de contagios por varias semanas. Pero en el actual sistema de semáforos el municipio de Guatemala podría seguir descendiendo por 3 o 4 meses seguidos sin avanzar de fase, lo que sería desmotivador.
Déjame aclararte que por ahora NO creo que ésto sea lo anuncie el gobierno mañana. Creo que cambiarán los indicadores y que le darán trato distinto a las zonas urbanas que a los municipios rurales, mientras mantienen el “pico y placa”. Tal vez hasta permitan más adelante a los restaurantes y centros comerciales operar de una manera muy restringida en color rojo. Esto sería un cambio, pero aún se podría mejorar.
Esta es una maratón y se debe pensar en el largo plazo. Por esa razón es importante superar el pico de contagios en el tema de salud, pero también lo es tener momentos de respiro en el tema económico. Necesitamos los dos, y por eso los países que mejor lo han hecho hasta ahora han procedido a abrir estableciendo como condicionante de cada fase la tendencia a la baja por un período de tiempo. Le toca a Guate hacer lo mismo.
